Page 81 - LETRAS ILUSTRADAS
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Letras Ilustradas

LA CAMPANITA Y LOS
ÚLTIMOS RAYOS DE LUZ

Sara Escobar Pertuz

Un día mis padres decidieron ir de      Sin pensarlo, cerré la puerta y me      81
viaje, por lo tanto, me quedé sola.     metí en el armario. Sus pasos se
Fue extraño sentir cómo el silencio     acercaban y supe que entró porque
recorría toda la casa, mis padres       la puerta se abrió de golpe con un
solían dejarme sola, pero no más de     fuerte sonido. Se fue, escuché una
un día. Esta vez fue diferente. Fui a   campanita, me asomé y había una
la cocina, me preparé un sándwich       carta. Corrí y la recogí. La letra
y me serví un poco de jugo. Me          era como la de una niña de siete
acosté en el cuarto de mis padres,      años, pero la logré entender. Decía
me acomodé y encendí la tele para       “Cuando el reloj marque 5 minutos
ver películas. Pasaron una o dos        él sabrá”. Me costó un tiempo y
horas y escuché como llamaban           entendí. Salí y me escondí debajo
a la puerta insistentemente. Me         de la cama puse un temporizador
paré y dudé en seguir, pues mis         cada 5 min para salir y supe que
padres ya se habían ido. Toqué la       el movimiento era vida. Escuché
perilla de la puerta y sentí un fuerte  unos fuertes pasos llegando a
escalofrió. Me detuve y miré por la     la habitación, mi respiración era
mirilla, pero no había nada ni nadie.   agitada, la puerta de la habitación se
Corrí de vuelta a la habitación de      abrió los pasos siguieron derecho,
mis padres y me encerré. “¡Poom!”       mi reloj vibró y supe que tenía que
La puerta se abrió de golpe. Lo que     irme de ahí. Corrí lo más rápido
fuera esa cosa estaba dentro de mi      que pude hacia la puerta principal
casa, me escondí debajo de la cama      esperando que estuviera abierta.
y esperé. Me desperté con los rayos     Llegué, pero estaba cerrada y los
de luz que calentaban mis mejillas,     pasos se acercaban. Yo hacía lo
todo estaba como si nada hubiera        posible para abrir esa puerta. Los
pasado. Así supuse que todo fue una     pasos se sentían tan cerca que
pesadilla. Pasó todo el día y, cuando   comencé a temblar, me volteé y los
el último rayo de luz se escondió,      rayos de luz pasaron por mi espalda.
escuché los mismos golpes, pero         Ya no estaba, suspiré y sentí un
esta vez eran más fuertes y sonaban     alivio en ese mismo instante supe
como si tumbaran la puerta. Corrí.      que no era una simple pesadilla esto
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